Elaboramos este estudio sobre la relación del gasto público con empresas privadas de salud. Esperamos que contribuya al debate para hacer frente a los procesos de captura de la iniciativa pública por el poder de grupos empresariales privilegiados.
Esta no es una investigación solamente para interesados en la salud o el gasto social, también sirve como un ejercicio para comprender el rol del gasto en el patrón de reproducción de capital de Ecuador.
Algunos datos relevantes:
– Durante el gobierno de Rafael Correa el gasto se incrementó 92% (en valores constantes), el IESS contribuyó con el 34% de ese crecimiento.
– Sin embargo, mientras en el período 2007-2013 el IESS perdió nueve establecimientos de salud a pesar de su crecimiento en gasto en salud. Al contrario, los contratos privados crecieron mil por ciento en el mismo período.
– Las empresas médicas vinculadas a los convenios con el IESS están bajo el control de grupos económicos controlados por pocas familias, entre las que destacan: Carolina Eljuri de Neme y Walter Wright Durán Ballen de Hospital los Valles; Valverde la Clínica Kannedy; López-Ordóñez del Hospital Metropolitano; o Roberto Gilbert Febres-Cordero de la Clínica de Guayaquil. Todas estas familias con intereses en otras industrias de la economías como inmobiliaras, comunicaciones, comercializadoras, seguros.
– Los ocho mayores prestadores privados de servios médicos representan el 1% del sector y, sin embargo, acapararon el 40% de los ingresos registrados en la Superintendencia de Compañías (para el 2012) correspondientes al mercado de servicios médicos y laboratorios. (El informe incluye un ranking de clínicas y hospitales privados).
– Solamente en un muestro de cinco grupos económicos vinculados a clínicas y hospitales, para el 2014 se encontraron 14 filiales registradas en paraísos fiscales. Estos grupos económicos obtuvieron juntos ingresos mayores a los mil millones de dólares; en cambio pagaron 18 millones de dólares, esto es el 1.5% de sus ingresos.
– A pesar de la reducción del gasto de bolsillo, Ecuador, todavía se encuentra por encima de la media sudamericana y ocupa el tercer lugar. En el 2013 aún el 43% del gasto en salud está financiado por las familias ecuatorianas.