Chevron vuelve a involucrarse en nuevos crímenes corporativos, en este caso por su vinculación con paraísos fiscales usados para estafar al estado australiano. La Oficina Australiana de Impuestos obligará a la transnacional a pagar unos 226 millones de dólares y otros gastos, convirtiéndose ésta en una de las mayores sentencias tributarias del país.
La súper petrolera estadounidense habría deducido grandes cantidades de impuestos, utilizado la sobrevaloración del pago de intereses de un préstamo auto concedido. La Oficina Australiana de Impuestos consideró que el interés de ese préstamo interno era demasiado alto y le permitió a Chevron abultar sus deducciones y transferir sus beneficios a un paraíso fiscal.
En palabras sencillas: Chevron creo en secreto una subsidiaria en Delaware, un paraíso fiscal corporativo en Estado Unidos, de donde se otorgó un préstamo a altos intereses sobre un valor de 1.881 millones de dólares, de manera que logró incrementar fictíciamente sus costos financieros, para aparentar una reducción de sus ganancias, y pagar una cantidad relativamente menor de impuestos.
Tax Justice Network explica que el monto de la evasión o elusión tributaria podría haber alcanzado por lo menos todo el presupuesto en salud y la mitad del presupuesto en educación de Australia. Además, el tamaño de la estafa podría ser mayor, actualmente está en investigación otro préstamo por un valor de 32.000 millones de dólares, un monto similar a la deuda externa de uno de los pequeños países empobrecidos dónde Chevron explota o explotó recursos petroleros, como Ecuador.
Este caso nuevamente insiste en el gran poder de una transnacional para burlar un Estado, incluso uno altamente regulado como el de Australia. ¿Cuánto es el posible monto de evasión tributaria de Chevron en países de América Latina?
Fuente: CDES
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